Capitulo 3 Presentaciones (Melissa)

Bueno chicas(os):) aqui paso a dejarles otro capitulo^^, qe espero qe lesguste mucho:P, y pues los dejo leyendo;) y dejen comentarios sobre que les esta pareciendo la historia:D para saber si voy bien o si me falta algo & asi:) besos♥

Pero como siempre, mi curiosidad me venció y me acerque demasiado al peligro y esta vez, no hubo nadie para salvarme...

Estaba perdida y yo lo sabia, pero derepente, algo muy fuerte me golpeo por la espalda y cai desmayada. Alcance a escuchar ruidos realmente extraños, parecian gritos, y rugidos. Queria lenvantarme e irme huyendo de ahí, pero mi cuerpo no me respondia. Y para variar, escuche movimientos demasiado cerca de mi, tal ves eran ascecinos o algo asi y mi cuerpo no reaccionaba.

-¿Quien es ella?- Pregunto una voz que no reconoci.
-No lo sé, pero creo qe sera mejor si la llevamos con la manada.-Respondio una voz baronil, la mas hermosa que jamas habia escuchado, pero que tampoco reconoci.

Derepente unos brazos comenzaron a levantarme, y trate de abrir los ojos, de moverme, poner recistencia o algo pero nada. Al parecer a mi cuerpo le gustaba ese tacto, pues en cuanto me acomodo entre sus calidos brazos, realmente quede completamente relajada y me sentia muy segura, como si nada me pudiera lastimar estando en ellos. Era un hombre quien me cargo, pues aparte de haberlo hecho con mucha facilidad, su aroma era total y completamente irrecistible y baronil, nunca habia olfateado algo como esto, era esquisito, especial. Despues ya no recuerdo nada, pues cai en un profundo sueño.

-O-
Cuando desperte, no reconoci el lugar, era una habitacion de baron, lo pude saber por la decoracion y por el mismo olor tan irresistrible y delicioso de antes, que inundaba toda la alcoba. Pero ¿en donde me encontraba?, lo ultimo que recuerdo, fueron aquellos calidos brazos que me cargaban y ahora estaba en esta acogedora habitacion. Me pare lo mas rapido que pude de la cama a pasos torpes y cai al piso con un fuerte golpe, llevandome entre las manos un bellismo florero. Bien hecho Melissa pensé, y enseguida se escucharon ruidos de sillas de la parte inferior de la casa (si es que eso era) y pasos demasiado fuertes y veloces por las escaleras, cuando voltie mi vista hacia arriba pude ver a unos 4 sujetos de unos 17 o 18 años, que se veian myt fuertes, demasiado guapos y... ¡Concentrate! me dije a mi misma, no me encontraba en la mejor situacion como para andar admirando a 4 sujeros desconocidos. Y de repente escuche una voz femenina pero fuerte.

-Muevanse.- Todos obedecieron y se acerco a mi una muchacha con 2 chicas mas.-¿Quien eres?.-Me dijo con un leve movimiento de cabeza.
-¡Vamos, Juliet! dale un poco de tiempo para que se despeje un poco.-Dijo el joven mas apuesto que había visto en toda mi vida.
-¡Tu callate!-Le grito una de las muchcachas, que por cierto se veia muy enojada, me miraba con ojos de odio.-Todo esto es TU culpa.-Le dijo al chico apuesto, y no se porque pero me llene de rabia al ver que le hablaba así a al joven de mis sueños.- si nos hubieras hecho caso, nada de esto estaria pasando.

Siguieron discutiendo mientras yo los observaba con la boca abierta, aun sin comprender que sucedia a mi alrededor. Mi cabeza estaba un poco aturdida por la belleza de aquel joven y por la situacion en la que me encontraba y solo pude tartamudear:

-¿Do do donde es !donde estoy!?
-Estas a salvo, perdona por no haberme presentado antes, soy Juliet, la lider. El es Armando.-Era el chico que me tenia aturdida por tanta belleza junta.- El es Gabriel, Noah, Jordan, Amy, Paula y Susana.- La última era la chica que me veia con odio.
-Claro.-Bufo Susana.-Presentate a la razon de nuestros problemas, ¿no le quieres decir de una vez que somos?.-Lo dijo con cierta ironia.-Si deberiamos matarla.-Dijo eso con mucho odio.

Armando reacciono mirandola con mucho mas odio del que ella me miraba y... ¿le estaba gruñendo?, apreto sus puños y comenzo a agitarse un poco.

-Tranquilo.-Dijo Susana un poco asustada y levantando las manos a la altura del pecho, tratando de tranquilizarlo.-Solo era una sugerencia.- levanto los hombros como si lo que dijo hubiera sido algo insignificante y comenzo a jugar con su cabello.

Yo comenzaba a respirar bastante fuerte, me afectaba lo que escuchaba, estaba sobresaltada y tenia mucho miedo convinado con rabia. El aire comenzaba a tensarse mas y mas hasta que Noah hablo.

-¿Y como te llamas, pequeña?.-Me dijo en un tono muy amable, el mas amable que habia escuchado en todo el día

-Mi mi no nombre es Me Me ¡Melissa!-Realmente me habia costado decir esa simple oracion. Me estaba comportando como una tonta.

-Melissa.-Repitio Armando para si mismo con una expresion en su rostro que no comprendi, era ¿Felicidad?, o talves era eso lo que yo queria pensar.

-Bueno, sera mejor que la dejemos descansarla un rato más.-Dijo Noah.

-No, esperen. ¿Donde estoy?.-No se podian ir sin contestar mis preguntas, o al menos yo no planeaba dejarlos ir asi como asi

Armando se acerco ami y se puso de cunclillas, para que nuestras caras quedaran frente a frente. En ese momento senti que mi corazón se aceleraba cada vez mas y mas ¿Qué me estaba pasando?

-Descansa, cuando despiertes, contestare todas tus preguntas.- Me dijo muy serio, y con una mirada muy tierna. No me atrevi a contradecirlo, y eso era muy raro en mi, pero es que cuando me dijo contestare, algo en mi realmente se alegro, eso queria decir que lo volveria a ver. Ademas, me sentia cansada.

Así que simplemente asenti, mientras el me tomaba en brazos como si fuera una pluma, y antes de que pudiera emitir queja alguna, me acosto en la cama, delicadamente, como si yo me pudiera quebrar con cualquier movimiento brusco. Todos comenzaron a salir de la habitacion y Armando continuaba a mi lado, cuando nuestras miradas se cruzaron, senti como me iva tornando roja y me perdia en ese maravilloso mar cafe, me miraba como nunca nadie me habia visto en mi vida, eran varios sentimientos juntos cariño, ternura, como si temiera que algo me pudiera pasar si se iva, bacilo un poco antes de irse, como si algo lo retuviera a mi lado, pero luego escucho algo, voltio su perfecto rostro en direccion a la puerta y se marcho cerrandola lentamente tras de el. Cuando salio suspire tratando de tranquilizarme de aquella emocion que traia dentro y que simplemente no podia expresar. Comence a caer en un profundo sueño, no sin antes pensar bastante en Armando, algo me decia que no era simplemente Armando, si no, Mi Armando...